Artista : Caja Negra
Álbum : Caja Negra
Sello : Independiente
País : Bolivia
Año : 2012
Álbum : Caja Negra
Sello : Independiente
País : Bolivia
Año : 2012
Bolivia es una tierra enigmática en materia de rock, o mejor dicho exótica o desconocida. Debe ser la escena más pequeña de nuestro idioma (más pequeña que las centroamericanas incluso); la calidad existe pero la historia no está bien documentada, o no queda clara. Es bastante complicado aún en esta era saber que sonidos están paseándose por sus altas tierras.
Entre lo poco que se asoma se encuentra Caja Negra: un cuarteto casi totalmente instrumental que se mueve en los terrenos del Stoner, pero con toques de los últimos 20 años a lo Tool o Kyuss. En medio de tanta sicodelia hay algunas apariciones de sonidos andinos que hacen rememorar a sus co-terraneos Wara (aunque lo de ellos era más de la vena progresiva). Las guitarras dominan ampliamente la música: solos, atmósferas, efectos, riffs y toda clase de trucos que está por demás decir que recuerdan las épocas cuando el rock solo podía entenderse como un elemento duro. Acompañado de lo que parece ser demasiado, aqui es preciso: el bajo en forma, es fuerte, constante, puntual, nada rígido estruendoso, rudo, crudo y otra serie de adjetivos, pero nunca monótono; mientras que la batería es la más perfecta para esta agrupación.
El primer track ''Comparsa'' se escuchan las notas de una Zampoña que lentamente crean una obscura y melancólica atmósfera propia del post-rock (pero sin toneladas de capas de sonido); después entrará el guagua, un jam, rock-blues y morirá de una forma muy similar a la que inició. Tantas ideas justifican sus casi 9 minutos de duración; en ''Caja Negra'' el rock potente y los momentos de calma se intercalan constantemente, tiene un solo por demás destacable en los primeros minutos. Aquí se da una de las pocas intervenciones vocales y debemos concluir que eso no es lo suyo; ''Planeta hostil'' es otro track a destacar, la secuencia de la batería es la más interesante del disco, aunque la pieza no llega a un punto culminante.
Lo que nos dice este cuarteto es que el rock existe (o existió) y nos dan una muestra de como es o como o como volverá a ser.
Entre lo poco que se asoma se encuentra Caja Negra: un cuarteto casi totalmente instrumental que se mueve en los terrenos del Stoner, pero con toques de los últimos 20 años a lo Tool o Kyuss. En medio de tanta sicodelia hay algunas apariciones de sonidos andinos que hacen rememorar a sus co-terraneos Wara (aunque lo de ellos era más de la vena progresiva). Las guitarras dominan ampliamente la música: solos, atmósferas, efectos, riffs y toda clase de trucos que está por demás decir que recuerdan las épocas cuando el rock solo podía entenderse como un elemento duro. Acompañado de lo que parece ser demasiado, aqui es preciso: el bajo en forma, es fuerte, constante, puntual, nada rígido estruendoso, rudo, crudo y otra serie de adjetivos, pero nunca monótono; mientras que la batería es la más perfecta para esta agrupación.
El primer track ''Comparsa'' se escuchan las notas de una Zampoña que lentamente crean una obscura y melancólica atmósfera propia del post-rock (pero sin toneladas de capas de sonido); después entrará el guagua, un jam, rock-blues y morirá de una forma muy similar a la que inició. Tantas ideas justifican sus casi 9 minutos de duración; en ''Caja Negra'' el rock potente y los momentos de calma se intercalan constantemente, tiene un solo por demás destacable en los primeros minutos. Aquí se da una de las pocas intervenciones vocales y debemos concluir que eso no es lo suyo; ''Planeta hostil'' es otro track a destacar, la secuencia de la batería es la más interesante del disco, aunque la pieza no llega a un punto culminante.
Lo que nos dice este cuarteto es que el rock existe (o existió) y nos dan una muestra de como es o como o como volverá a ser.